La Catedral Metropolitana de Santiago de Guatemala, ubicada en el corazón del Centro Histórico de la Ciudad de Guatemala, alberga en su subsuelo uno de los espacios más enigmáticos y significativos de la historia eclesiástica y política del país: las criptas. Estos espacios funerarios no solo guardan restos humanos, sino que son testigos silenciosos de más de dos siglos de historia nacional.
Ubicación y Estructura de las Criptas
Las criptas se encuentran bajo el altar mayor y se extienden hacia los laterales del presbiterio. Son cámaras subterráneas abovedadas de ladrillo y piedra, construidas siguiendo modelos europeos, especialmente españoles, donde se enterraba a personajes de alto rango eclesiástico y político. El acceso a estas criptas generalmente no está abierto al público, aunque en algunas ocasiones especiales o visitas guiadas pueden ser vistas por el público general.
Las criptas albergan los restos mortales de una serie de arzobispos, obispos y personajes históricos importantes como expresidentes. No todos los arzobispos han sido enterrados en la cripta, ya que algunos fueron enterrados en otros lugares por decisión personal o por razones políticas.

Datos Curiosos sobre las Criptas
Algunas tumbas no están identificadas públicamente. A pesar de los registros eclesiásticos, no todos los restos han sido plenamente identificados. Algunos se cree que pertenecen a benefactores o personas nobles de la época colonial. Se han realizado estudios arqueológicos en varias ocasiones, especialmente durante restauraciones, los cuales han permitido confirmar la autenticidad de algunos restos y conocer detalles arquitectónicos únicos. Símbolos masónicos y crípticos han sido reportados por algunos estudiosos, lo cual ha generado diversas teorías sobre los vínculos entre miembros del clero y órdenes secretas en los siglos XIX y XX. Las criptas de la Catedral Metropolitana no solo tienen valor arquitectónico, sino que son un símbolo del poder espiritual y político que la Iglesia Católica ha ejercido en Guatemala desde el período colonial hasta la actualidad. Constituyen un patrimonio vivo de la memoria nacional y de la espiritualidad guatemalteca.
Visitas y Accesibilidad
En fechas como el Día de Todos los Santos (1 de noviembre) o durante eventos especiales de la Iglesia, se han abierto temporalmente las criptas al público. Algunas visitas guiadas han sido organizadas por la Oficina de Turismo Religioso de la Arquidiócesis o por el Instituto de Antropología e Historia (IDAEH).
Las criptas de la Catedral Metropolitana de Guatemala son mucho más que simples tumbas: son una cápsula del tiempo que encapsula siglos de historia religiosa, política y cultural. Con personajes ilustres enterrados en su interior y con un aura de misterio y solemnidad, siguen siendo uno de los secretos mejor guardados de la capital guatemalteca y un destino obligado para los interesados en el patrimonio y la historia del país.

Contexto Histórico y Construcción de la Catedral
La Catedral Metropolitana, oficialmente llamada Santa Iglesia Catedral Metropolitana Basílica de Santiago de Guatemala, comenzó su construcción en 1782 y fue concluida en 1815, aunque algunos detalles arquitectónicos y ornamentales continuaron agregándose en décadas posteriores.